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En busca de insecticidas efectivos, seguros y limpios.

“El uso masivo de insecticidas en algodón, causa un impacto de tal magnitud a la población rural y al medio ambiente, que ha activado las alarmas de los organismos de salud pública de India, China, Egipto, Paquistán y otros países.

Las cifras muestran que el cultivo, que solo representa el 2.4% del área total que se siembra en el mundo, consume el 24% de los insecticidas y el 11.5% del total de agrotoxicos que se producen.

Los daños a la población, directamente involucrada en las fumigaciones, son alarmantes: cada año, se registran tres millones de personas intoxicadas, veinte mil mueren y un millón requieren hospitalización.

 

Castiga al medio ambiente contaminando el aire, los suelos, las fuentes de agua y favorece el calentamiento global, por la emisión de gases con efecto invernadero.

Para volver sostenible el cultivo es necesario volver a implementar el manejo integrado de plagas, utilizar insecticidas efectivos, seguros, limpios y eliminar los químicos persistentes, de alta toxicidad.

En los últimos años, los insecticidas genéricos aumentaron su participación; las moléculas bajo patente la redujeron; aquellas que llegan al agricultor para controlar las plagas, son cada vez más escasas; algunos de reciente desarrollo como los neo nicotinoides, se cuestionan por los daños a las abejas y riesgos a la polinización.

Es conveniente volver a aquellas sustancias naturales, limpias, eficientes y seguras que han sido utilizadas con éxito e incluirlas de nuevo en programas de manejo integrado de plagas.”

Las algas diatomáceas, TDs, una opción, natural, segura y eficiente.

La información anterior, sirve de referente para considerar el uso de las algas diatomáceas, como alternativa importante para el manejo de las plagas en la agricultura moderna.

Las diatomáceas o diatomeas, son lacustres y marinas, de origen sedentario están formadas por esqueletos fosilizados de algas unicelulares. Como paredes celulares tienen frústulos, compuestos por sílice amorfa, son llamadas diatomáceas alimentarias, diferente a sílice calcinada. Su presencia se concentra en depósitos, que forman la tierra de diatomáceas, TDs, por sus siglas.

Al hablar de TDs, se hace referencia a la fuente más importante de silicio, elemento que como oxido, constituye la casi totalidad de la diatomácea. La investigación demostró que el silicio, elemento omnipresente en la naturaleza, participa activamente en la fisiología del vegetal y en el comportamiento productivo de los suelos.

En agricultura, ganadería, control de plagas caseras, su uso no implica riesgo al ambiente, al hombre o a los animales de sangre caliente. En el mundo hoy son usadas en protección de alimentos, granos y semillas en almacenamiento, sin fijación de residuos; están avaladas por las agencias medioambientales y de control de alimentos y drogas en USA y la Unión Europea.

Se utilizan en control de plagas en cultivos sostenibles, explotaciones ecológicas, de precisión urbana, proyectos de manejo orgánico y ecológico, parásitos del ganado, animales domésticos, mascotas y en el hogar para controlar plagas caseras. Sus restricciones de uso, básicamente se relacionan con la fenología del cultivo: evitar su aplicación al follage, en época de floración, para no afectar las abejas ni su función polinizadora.

A pesar de ser un ingrediente activo seguro, su contacto con ojos y manos puede causar irritaciones; las aplicaciones deben ser recomendadas por un ingeniero agrónomo y en su manejo, al igual que con cualquier producto usado en protección de cultivos, se debe emplear equipo de protección apropiado.

AgProteccion Sostenible S.A.S., elabora sus formulaciones AgDiathoSoil™, con TDs grado alimentario, clase amorfa. Sus características y propiedades se valoran antes de cada procesamiento.

Las TDs pertenecen a la categoría toxicológica III, W.H.O. No son toxicas para mamíferos y animales de sangre caliente. Tienen efecto residual prolongado. El ingrediente activo es natural y limpio. De uso permitido en agricultura orgánica y ecológica. No fitotóxicos. Muy estables. Sin condiciones especiales para almacenamiento o transporte.

TDs en control de plagas.

Existen cerca de cinco mil especies diferentes de algas diatomáceas. No todas presentan la misma efectividad ni controles similares. El nivel de efectividad depende de las características físicas y químicas: contenido de silica, tamaño de partícula, pH, humedad, capacidad para la absorción de lípidos, y contenido de arcilla como impureza.

Su acción física y mecánica, no genera resistencia; entra en contacto con la plaga y ejerce su efecto abrasivo y de adsorción sobre la exocutícula; la perfora como múltiples agujas y altera el comportamiento de los lípidos cuticulares. Por leve que sea la lesión, siempre les origina deshidratación y muerte por asfixia.

Los lípidos recubren la superficie del insecto e intervienen en múltiples funciones: regulan el balance hídrico y evitan la deshidratación que les resulta fatal; controlan la absorción de insecticidas, otros químicos y la penetración de micro organismos; afecta procesos de comunicación química, como el de las feromonas de contacto. La TDS, aún en dosis sub letales, afecta el ciclo de vida y la supervivencia de la plaga, en especial en presencia de otros agentes de control.

Inmediatamente entra en contacto con la plaga empieza su actividad sobre la plaga; embargo no muestra resultados inmediatos por no tener efecto de choque. Los niveles de control más altos se observan entre los tres a siete días siguientes a la aplicación; en el tratamiento de granos en almacenamiento, sigue controlando 120 días después de la aplicación.

TDs agrega importantes y variados beneficios tanto al suelo como al cultivo:

Cuando se usa como acondicionador de los suelos.

Es fuente de microelementos deficitarios por desmineralización; ayuda a disminuir fitotóxicidad de aluminio y de hierro porque los contenidos altos. Al aplicar silicio, en ocasiones acompañado de fuentes de acidos húmicos y fulvicos, mejora la calidad del suelo y el sistema de defensas de la planta se hace más eficiente. La totalidad de los cultivos responden a las aplicaciones de silicio.

La raiz absorbe el silicio como ácido monosilicico y lo traslada hacia los brotes nuevos, se concentra por perdida de agua y se polimeriza, primero a sílice coloidal y luego a gel de sílice.

A medida que el contenido de ácido silícico, se deposita debajo de la cubierta cuticular, forma una doble capa silicio cutícula; esta propiedad confiere al silicio capacidad para aliviar situaciones de estrés biótico y abiótico y hacer que la planta resista ataques de insectos, ácaros, nematodos y enfermedades.

Para el estrés que causa el exceso de elementos esenciales como fosforo, nitrógeno, sodio, manganeso y aluminio, el silicio ofrece importante ayuda al suelo; si el contenido de fosforo es muy alto, el silicio limita la absorción de la parte inorgánica, sin variar el contenido de la organica; y elimina la inactivación del zinc, que causa el exceso de fosforo inorgánico. Con la utilización de silicio se eliminan problemas fisiológicos como inactivación enzimática y creación de presión osmótica adicional. El estrés que causa la deficiencia de fosforo, en banano es importante, por la presencia de componentes alofàticos en la composición mineralógica de estos suelos y porque los altos contenidos de hierro y magnesio favorecen la fijación del fosforo; haciendo necesario aplicar, en forma adicional fuentes del elemento. Para liberar el fosforo fijado, debe aplicarse silicio por que se requiere de fuentes edáficas para que ocurra la reacción. El silicio no solo libera fosforo, también inactiva hierro presente en el suelo. Para que la planta lo pueda asimilar, deben formarse phyllosilicatos de hierro, compuestos muy estables que no permiten que el hierro vuelva a solubilizarse. La translocación del sodio hacia brotes nuevos está ligada a la transpiración, por lo tanto, la aplicación de silicio en suelos donde se presenta acumulación de sales, ayuda a disminuir la transpiración y el flujo de sodio a la planta.

Las bondades del silicio son evidentes y variadas: su acumulación sobre la cutícula de las hojas, produce refracción de la luz y mejora notablemente su asimilacion; activa procesos fotosintéticos que incrementan la producción de almidones y azucares.

El cotín, componente natural de la pared celular de la planta, es un polímero complejo, formado por acidos grasos insolubles y es repelente al agua.; al combinarse con el silicio, forman una película muy resistente capaz de proteger a la planta de la excesiva deshidratación que causa la evapotranspiración y la excesiva humidificación de la superficie; la planta se protege de las infecciones, de la luz ultravioleta y de los daños que causan las heladas. Las hojas se hacen menos vulnerables a los efectos de la degradación enzimática que causa la penetración de las hifas de los hongos.

El silicio estimula la asimilacion de nitrógeno y previene la excesiva asimilacion de potasio; incrementa el tejido foliar, los tallos se hacen más robustos, la raiz más longeva y se mejora la actividad oxidante.

La deficiencia de silicio en caña de azúcar, produce disminución importante del contenido de fosfato orgánico, afectando la concentración de sacarosa. En arroz, en casos de estrés biótico y abiótico el silicio permite que los tallos, hojas y panículas tengan crecimiento recto, por mayor aprovechamiento de luz sobre la espiga y al igual que con todos los cereales, se reduce el volcamiento causado por deficiencia del elemento.

El silicio aumenta la concentración de oxígeno en el sistema radicular y fortalece las paredes del canal, permitiendo que la planta respire, aun en suelos que presentan inundaciones y encharcamiento.

Las aplicaciones de silicio se deben hacer como parte integral del programa de nutricion del cultivo, si estas se suspenden, a pesar de su acumulación, la resistencia con la que favorece a la planta, se pierde.

El silicio es el único elemento que aun en dosis superiores a las recomendadas, no causa alteraciones ni fitotóxicidad.

Cuando se usa como biocida.

Las TDs, son fuente importantes de silicio; como parte del ciclo del elemento, este es expulsado de las capas más externas de las células epidérmicas, a través de minúsculos canales, se seca y forma cristales que se acumulan sobre la superficie de las hojas. Estos cristales irritan los aparatos bucales de los insectos y nematodos y hacen que las plantas tratadas no sean atractivas para la plaga; actúa como barrera física que impide la penetración de las hifas de los hongos.

En las cucurbitáceas, el silicio retrasa la sonescencia de las hojas, las hace más verdes al incrementar la actividad de enzimas y compuestos fenólicos favorece el desarrollo del área foliar. En banano, el silicio activa los mecanismos de defensa de la planta, sus efectos sobre la quitina del hongo, retardan la entrada y desarrollo de Micosfaerella mussicola, causante de sigatoca negra de la hoja.

En frutales, el silicio fortalece la epidermis, por aumentar la protección contra agentes externos, incrementa la intensidad de los pigmentos naturales, previene la caída precoz, prolonga la vida útil y puede incrementar producción de solidos solubles, grados brix y azucares. En flores favorece la durabilidad e intensifica el tono de pigmentación.

  

Formulaciones de TDs, ofrecidas por AgProteccion Sostenible. S.A.S.

AgDiathoSoil™ polvo mojable, es compatible con otras ayudas usadas en protección de cultivos; está recomendado para control de plagas en cultivos industriales, jardines, escenarios deportivos, huertos, praderas o barbechos. El espectro de control incluye nematodos, trips, orugas, mosca blanca, barrenador del maíz, carpocapsa, babosas, ácaros, cochinillas, chinches, gusano pasador del tomate. Hay resultados preliminares que muestran en algodón control de picudo; en café de broca; en papa de polilla, chiza y gusano blanco. Por ser soluble en agua, facilita ubicarlo en la parte deseada de la planta y evitar arrastre y deriva. Dosis. 1.5 kg p.c. / h en 200 a 400 litros de agua. Bajo invernadero 2 gr / L, en áreas menores: 5 gr / L / 10 m2 de superficie a tratar. Como su acción es de contacto, la planta debe ser cubierta en forma total, tanto el haz como el envés.

AgDiathoSoil™. Polvo para espolvoreo. Protección de granos almacenados.

Cada año se pierde el 6% de los granos que produce el mundo, durante su almacenamiento, por causa de las plagas. Estas causan daño directo al contaminar y consumir grano e indirecto por el calentamiento y proliferación de hongos y de micotoxinas. En su protección se usan insecticidas fumigantes, básicamente por el bajo costo por tonelada tratada; no obstante, la toxicidad de estos productos presenta riesgos para los operarios y el ambiente; además, el proceso requiere de carpas que dificulta y encarece el tratamiento. Por otro lado, su poca residualidad, hace que controlen plagas presentes pero no los instares intermedios. Las desventajas anotadas, incrementan en forma permanente, el uso de TDs. Cada año, esta actividad consume más de 1.5 millones de toneladas, por su eficiencia, seguridad y facilidad de manejo; además, la tendencia de las partículas de TDs de adherirse a la superficie del grano, la reducción del peso hectolitrito y del pH, constituyen ventajas importantes. Los coleópteros causan el mayor daño a los granos en almacenamiento. El nivel de control de AgDiathoSoil. Polvo para espolvoreo depende de la especie y estado de desarrollo de Sitophyllus orizae, Triboliun castaneum, Sitophyllus zea maiz, Orizaephilus surinamensis, Plodia interpuntella y Epesthia kuehniella. Dosis de 0.5 kg / t de grano, aplicado en movimiento, mostro que adultos de Sitophillus spp tienen alta susceptibilidad; R dominica tolerancia media y T. castaneum, alta tolerancia. Dosis de 1.5 kg / mostro ser la de mayor consistencia y altos controles después de 120 días después de la aplicación.

En arroz, trigo, cebada, maiz, avena, lenteja, arveja, garbanzo, AgDiathoSoil™ ofrece protección adecuada en tratamientos de superficie, debe aplicarse con nebulizador, tan pronto se llene el contenedor y se nivele el grano. Usado aun en dosis superiores a las recomendadas no afecta la viabilidad ni el vigor del grano o semilla tratada. AgDiathoSoil™ Polvo espolvoreo, en mezcla con el hongo Beauveria bassiana, incrementa la acción sobre adultos de Acanthoselides obtectus y Sitophillus orizae.

AgDiathoSoil™ Cebo. Control de hormigas. Para aplicación directa, no se debe disolver en agua. Tiene como ingrediente activo TDs y una hormona sexual de agregación, específica para género de hormiga. Como inertes están presentes subproductos de caña, oleaginosas, maiz y cítricos. Es conveniente conocer el género de la hormiga a controlar para seleccionar el cebo apropiado, porque la hormona varía según el género de hormiga. Para hormiga arriera es Ata y la hormona esta presente en la formulación estándar del cebo. Se debe manejar con guantes, para evitar contaminarlo. La aplicación debe ir dirigida al suelo, a la boca del hormiguero y zonas de plateo. Aplique 100 gr / sitio a tratar o 1.5 kg / ha.

AgSeedTreater™ polvo mojable. Tratamiento de semillas y material de propagación. Insecticida – fungicida, recomendado para tratar materiales de propagación y semillas de diferentes cultivos. Ofrece protección contra los insectos, hongos, bacterias, que se presentan en almacenamiento y en el suelo. Ingredientes activos TDs y cobre micronizado. Trae un acumulador de energía que activa la germinación, la hace vigorosa y uniforme; fortalece el enenraizamiento y reduce el estrés post trasplante. Dosis, 1 kg / tonelada de semilla o de material vegetal a tratar. Para tratar 1 tonelada de semilla: disolver 500 gr de AgSeedTreater™ en agua y agitar, agregue el acumulador de energía que viene en el frasco y agite, adicione el resto del producto y agite. Vierta la mezcla al tanque de tratamiento; adicione al tanque el volumen de agua necesario y sumerja la semilla, durante un tiempo no menor de 30 minutos. Retírela y déjela secar. Si no la va a sembrar inmediatamente, guárdela bajo cubierta, en ambiente controlado, utilizando empaques limpios y secos.

DiathoSoil™ home. Uso en el hogar. Cuidado de jardines y huertos animantes, domésticos, incluidas mascotas, control de plagas caseras e insectos en guardarropas, graneros, bodegas o sobre el piso: Preparar una mezcla utilizando 3 gramos del producto comercial, por litro de agua. Control de piojos en humanos, disolver 2 gr de producto en el champú, aplicarlo sobre el cabello, dejarlo actuar por quince minutos y luego enjuagar. Control de plagas en mascotas preparar una solución de 2 gr del producto / litro de agua.

™ By AgProtección Sostenible S.A.S